Avis : Hotel Costa del Sol

Mi experiencia en este hotel ha sido francamente decepcionante y raya en lo indignante. Comenzando por la habitación, no puedo otorgar ni una sola estrella. Fui víctima de un hurto descarado: una cadena de plata desapareció misteriosamente de la mesa dentro de mi habitación mientras yo no estaba. Ante la queja formal, la respuesta del personal fue simplemente inaceptable: se escudaron en una serie de "reglas internas" alegando que no se hacen responsables por objetos perdidos en las habitaciones, lo cual me parece una burla para cualquier huésped que confía sus pertenencias a un establecimiento. El “protocolo” que supuestamente aplicaron no fue más que un espectáculo improvisado para simular gestión, y para colmo, días después de haber regresado, encuentro mi cadena escondida en el fondo de mi maleta, algo que no puede explicarse más que como una artimaña para fingir que nunca fue tomada. Indignante y absolutamente reprochable. Además, constantemente nos cambiaban manualmente la configuración del aire acondicionado desde recepción. Cada vez que salíamos, al volver nos encontrábamos con cambios incómodos en la temperatura, demostrando una intromisión innecesaria y molesta en nuestra privacidad. En cuanto al servicio, la calificación es de una estrella únicamente porque intentaron disfrazar el robo con una supuesta investigación. De resto, el trato fue despectivo e irracional. Entiendo que no se debe ingresar al comedor completamente empapado, pero en dos ocasiones se nos negó el acceso incluso estando secos o apenas húmedos, con el plato ya en mano, bajo excusas absurdas de seguridad. El personal se manejó con cero criterio y una actitud altiva, más interesados en imponer restricciones que en ofrecer hospitalidad. La seguridad, como ya queda claro, es prácticamente nula. Uno no puede confiar ni en la privacidad de su habitación, y mucho menos en que sus pertenencias estarán seguras. Inaceptable. Respecto a las actividades cercanas a la ubicación, es probablemente lo único rescatable. El hotel está muy bien situado, frente al mar, lo que permite disfrutar de hermosas vistas y de un ambiente naturalmente privilegiado. A este aspecto le doy cinco estrellas. Es posible caminar tranquilamente por los alrededores y hay buenas opciones turísticas en las cercanías. En cuanto a comidas y bebidas, son mediocres y el trato del personal del restaurante empeora cualquier experiencia gastronómica que pudieran ofrecer. Detalles destacados (para mal): Falta de ética y transparencia en la atención al huésped. Robo de pertenencias dentro de la habitación. Protocolo interno ineficaz y superficial. Manipulación arbitraria del aire acondicionado desde recepción. Trato humillante por parte del personal del restaurante. Nula responsabilidad por parte del hotel en cuanto a seguridad. En resumen, no volvería jamás y no lo recomiendo bajo ninguna circunstancia, salvo que su único interés sea admirar el mar desde lejos y no esperar absolutamente nada más. Una e