Nuestra estancia ha sido una invitacion a volver y volver, empezando por el servicio al cliente. Un servicio de primera desde la persona que te recibe en el hotel y te abre la puerta del auto en donde llegas, las personas que amablemente te atienden en recepcion con una sonrisa y un autentico sentido de servicio, los maleteros que se desviven por pedirte un taxi y ayudarte a cargar lo que traigas sin que se lo pidas, y cualquier persona que trabaja en el hotel en el area de recepcion indudablemente esta para atenderte con la mejor disposicion de servicio. Tambien en el area de alberca, y restaurantes.
El lugar impecable, contando con una belleza arquitectonica. Su amplitud y distribucion tanto del hotel, como de los cuartos, te acogen. El hecho de ser un lugar abierto, nos deja sentir el clima, y el viento que corre es un sensacion muy agradable. La decoracion del lugar es calida y de buen gusto, dandonos un sentir de estar ”en casa”.
La ubicacion del lugar da pie a salir a caminar a la Marina, tanto de dia como de noche, con completa seguridad, y todos los lugares a donde fuimos estan muy cerca, a 5, 10, 15 minutos en auto: Walmart, Centros Comerciales, Malecon, Centro, Restaurantes, Terminal Maritima.
El acceso a la playa es una delicia, con unas vistas a la puesta de sol inigualables.
Disfrutamos las actividades extras que inlcuye la estancia en el hotel, y el hecho de no ser invasivas a nuestros momentos de estar.
La comida es muy buena, y aunque el precio es poco alto, vale la pena qued**** en el hotel a comer.
Quiero cerrar felicitando el programa de Servicio al Cliente que tiene el hotel, ya que seguro es una administracion que se toma su tiempo en el entrenamiento en esta area a todas las personas que laboran ahi. El servicio al cliente hace la diferencia en una experiencia, y eso es lo que buscamos al ir de vacaciones, vivir experiencias gratas y memorables.
Felicidades por su excelente servicio a todas las personas que laboran en Club Regina Puerto Vallarta!
Formidable
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