Hotel Areias Brancas

Hotel bem localizado, hotel novo com ótimos quartos, com atendimento e limpeza excelente. Café da manhã bom e preparam os ovos mexidos na hora. Com estacionamento e fácil localização. A ressalva e não ter elevador e dificulta a acessibilidade.

Bom lugar para se hospedar, com bons quartos e atendimendo e numa cidade ntipica domsul, vale apenas, preços bons ambiente limpi com uma boa localização e quartos espaço e iluminação excelente, recomendo.

Habitaciones amplias, limpias y el personal muy atento. El café da manha es correcto, sin cosas destacables. Muy recomendable en la relación costo beneficio y a una distancia que se cubre desde Buenos Aires en un día de manejo, sin exagerar.

El hotel muy lindo y limpio. Las habitaciones amplias y el desayuno muy abundante y todo riquisimo. Lo único para quejarme es que habia muchos mosquitos dentro de la habitación, por mas que estaba todo cerrado entraban por la ventana del baño que no cerraba bien.

En nuestro viaje a Camboriu, paramos a descansar en éste hotel, como ya lo hemos hecho en varias oportunidades. Siempre encontramos algunos cambios siempre para bien. Había reservado 2 habitaciones dobles pero me había equivocado en la fecha y como estaba completo nos dieron para los 4 la suite, una habitación excelente. Tienen hasta las 21hs un buffet para cenar, pocas opciones pero muy buenas sin necesidad de salir. Desayuno muy bueno. Cerca de la ruta, precio normal, muy buena atención. Excelente hotel para las paradas hacia las playas.

Fuimos de paso con mi familia al volver de Florianopolis para Argentina. La mala experiencia comenzó cuando llegamos a las 20 hs y el hotel no tiene para comer. No obstante, el personal de la noche nos recomendaron cenar en una hamburgueseria que esta a media cuadra (de mala muerte) o ir al centro en busca de una pizzeria. Busque en google la pizzeria mas cerca y fui, pero la misma ya no existia. Recorrimos varios lugares hasta encontrar un lugar para comprar una pizza y volver al hotel porque el centro no es para nada lindo (y eso que llegamos un sabado!). Dormitorio: olor feo que venia desde el baño, para mi la persona anterior que se alojo no estaba bien del estomago, y cerraron la puerta del baño concentrandose el olor nauseabundo ahi. La ducha tenia pelos en la rejilla. Lastima que no saque foto del momento. OLVIDENSE DESCANSAR: el hotel tiene muchas casas en sus alrededores y los perros ladran hasta altas horas de la madrugada. Desayuno: buena comida, pero el personal muy despectivo con los argentinos ni nos saludaron. Check out: nos atendio la gerenta, de muy mala manera, quieren cobrar gastos por demás que no lo permitimos, alegando que habiamos sacado comida del desayuno. Los invitamos a revisar los autos para que corroboren que no teniamos nada. Un desastre la verdad NO VUELVO MAS!

Paramos no Areias Brancas no retorno ao Rio Grande do Sul de uma viagem que fizemos à Buenos Aires. O hotel é muito bom. Tudo o que se precisa, funciona! Quarto grande, internet rápida, chuveiro e cama, perfeitos. Ar condicionado 100%. O café da manhã também foi ótimo. Limpeza exemplar. Pessoal educado e atencioso. Possui garagem fechada. Super indicamos!

Agradável surpresa em Rosário do sul. Paramos para dormir nessa cidade na rota de retorno para casa. Saímos de colônia del sacramento em direção à São Paulo. Cruzamos a fronteira em Rivera e a ideia era parar para dormir em Santana do Livramento, porém, as opções nessa cidade eram sofríveis. Decidimos seguir um pouco e parar em Rosário do Sul. Chegamos super tarde neste hotel e pudemos observar que ele estava cheio, dada a quantidade de carros no entorno. Não tínhamos reserva, e por sorte havia um único quarto vago, a suíte. Ficamos nela. Quarto enorme, cama super confortável, lençóis, travesseiros e edredom delicioso, limpo e cheiroso. O hotel é bem conservado e pôde-se observar o capricho os proprietários/ direção em não deixá-lo obsoleto. O café da manhã foi delicioso, várias opções para escolher. Ovos mexidos feitos na hora. Staff super prestativo e educado. Valeu muito a pena, se estiver nessa rota, hospede-se neste hotel. Você não vai se arrepender.