Hotel Vida Xunca Blanca

Atención amable y correcta, deben esmer**** en la limpieza de habitaciones y comedor, y sobre todo de servicios , cubiertos y vasos de desayuno, mediocres productos en el desayuno y falta de variedad no había frutas, las toallas muy desgastadas, amplias habitaciones y baños, bien ubicado cerca un supermercado con amplio horario, sin acceso para minusválidos, amplio aparcamiento aunque no asfaltado. Relación calidad precio aceptable.

La verdad es que cuando llegamos ya era como si nos hubieran tirado un jarro de agua fría…estaba todo muy anticuado y cutre. El armario no tenía puertas, la bañera era para mat**** literalmente las toallas pequeñas y nos ponían la de los pies para la cara porque no había más, no nos cambiaron las sábanas en toda la semana, una noche llegamos y la señora de la limpieza se había dejado la ventana del baño abierta y teníamos un ejército de 200 mosquitos en la habitación, la puerta de la habitación no tenía ninguna seguridad, las almohadas infames y por ende súper apartado y en medio de la nada. Podría seguir con la lista pero ahí lo dejo. Una experiencia mala que sin duda no repetiría. Espero que tomen nota

Decepcionante estancia vacacional. Hotel situado muy cerca de una carretera con mucho tràfico y mucho ruido. No descansamos bien ni una noche. La recepción poco amable y sin facilitar apenas información (estarìa cansado) Habitaciones muy pequeñas sin apenas espacio para moverte. No hay donde dejar las maletas ( tuvimos que dejarlas dentro del armario empotrado) No hay ni un solo colgador ( ni en el baño ni en la habitación)..para poder dejar la toalla. (Que la cambian cada dos dias). Colchón de muelles destrozado al que le han puesto como un topper encima para ir tirando...ese colchón ya està amortizado x favor!!!!. Las sabanas las "cambian" cada 4 dias....bueno...eso dicen. Las nuestras se quedaron sin cambiar en 5 noches que estuvimos. Piden disculpas....y se acabó. Baño con plato de ducha muy pequeño y con cortinas llenas de moho que tuvimos que cambiar comprando unas nuevas. La dueña nos dijo que porqué no habiamos avisado wue nos las hubieran cambiado...( señora...las instalaciones hay que revisarlas y verificarlas de una forma constante....el moho que tenian esas cortinas no es de un mes....quizàs fuera del año pasaso.) Disculpas y ya està.... Ahì queda todo. El desayuno un desastre. Sin ninguna variedad (5 dias poniendo lo mismo) y con una calidad infima del producto. El jamón que pone en sus fotos de presentación brilló por su ausencia. Ni un día lo pusieron. Queso de barra del peor...embutido de fiambre de jamón y chorizo de pamplona y salchichón que sacaban un dia tras otro a ver si se terminaba...al tercer dia ya estaba medio rancio. Me dà absolutamente igual la respuesta que me den sus propietarios porque todo lo que he dicho es cierto. Làstima de haber elegido éste hotel.... Pero ciertas circunstancias hicieron que "cayeramos" por alli. Pero ya sabes lo que dijo Santo Tomàs....

El precio es barato muy barato, pero lo barato no tiene porqué ser cutre. No hay ni un armario decente en la habitación. Hay un hueco, puse una toalla encima de la única balda que había para dejar la ropa. En el baño no había ni un vaso para dejar los cepillos de dientes,ni una balda para dejar cualquier objeto de aseo, ni secador (pero era de esperar). La cisterna del WC iba fatal,cuando tirabas una vez había que esperar un montón porque no cargaba bien, y mientras cargaba se oía muchísimo. La insonorización es mala, se oye todo. Los desayunos están muy bien, solo faltaría que el zumo fuera natural ganaría mucho . Imprescindible cambiar los colchones. Nuestra estancia fue de 8 noches, no nos cambiaron las sábanas y la limpieza fue muy justa.