Residencia Rosales

Es una albergue, súper anticuado, edificio antiguo en un cuarto piso, pasillo estrechísimo con paredes que han tenido goteras. Las habitaciones con camas de 90 bastante incómodas, sin televisión, sí wifi. No armario, sólo un par de estanterías altas y estrechas. Enchufes antiguos, la puerta del baño cerraba mal y queda un hueco grande en que se ve la luz. La taza del wc se movía. Al El desayuno está en la puerta de la planta baja, que nos dicen que no hay que llamar pero nos dejan afuera ya que no abren hasta después de media hora ni llamando. Comida muy básica, no es de cafetera el café (te lo traen).Tostada de pan de molde, magdalena o cereales, 3 yogures y naranjas. Porque fui con familia, si no no me hubiera quedado ahí solo, mucho ruido.